Al comenzar este proyecto nos preguntamos: ¿Cómo diseñar dos infografías sobre los productos nativos del Perú, organizados por cuencas, pisos altitudinales y ecosistemas, y que no parezcan despegadas de un libro escolar? Ambas infografías serían las piezas principales de la vitrina del Gran Mercado de Mistura 2014, la feria de gastronomía más importante de Latinoamérica, que se celebra todos los años en Lima (Perú) y que, durante diez días al año, es visitada por más de 500.000 personas.
Teniendo este objetivo en la cabeza, buscamos acabados de tipo manual, no uniformes o en serie, y al mismo tiempo expresivos y delicados. Encontramos entonces en las arpilleras el vehículo perfecto para desarrollar la propuesta y sorprender al visitante de la exposición. De esta manera, en una primera etapa de investigación, junto a un grupo de técnicos del Ministerio del Ambiente (Minam), determinamos los principales productos nativos peruanos y los ubicamos en los pisos altitudinales en los que está dividido el país, desde los 0 hasta los 4.200 m.s.n.m., y divididos a partir de las dos principales vertientes del Perú: la del Pacífico, y la del Amazonas.
El resultado fueron dos infografías de 2,80 metros de alto y 1,20 metros de ancho elaboradas con gran detalle, donde la información fue organizada y jerarquizada según su importancia, orden y la asignación de espacios. En paralelo hicimos una investigación visual sobre cada grano, tubérculo, hortaliza o fruta –más de 150–, para tener imágenes precisas y así poder desarrollar una propuesta gráfica coherente de cada variedad.
Ambas infografías fueron entregadas luego a la asociación de artesanas Kuyanakuy para que las produjeran. Así desarrollamos algo novedoso gracias a dos equipos con miradas muy diferentes –diseñadores y artesanas–, pero sorprendentemente complementarias. Hoy este trabajo ha recibido una mención en la 5ª Bienal Iberoamericana de Diseño, en la categoría Diseño Gráfico y Comunicación Visual, entre más de 800 proyectos procedentes de toda Iberoamérica. Esto nos llena de orgullo pues representa, sobre todo, el reconocimiento al talento de este grupo de artesanas.